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¿Qué es una hernia abdominal? Y no, no son mariposas…

¿Sientes mariposas en la panza, pero ni enamorado estás? ¡Mucho ojo! Puede ser una hernia abdominal. Aquí te dejamos cómo identificarla.

Vicente Alarcón

Si pensabas que una “hernia abdominal” era algo parecido a esas mariposas que sientes en la panza cuando ves a tu crush, déjame decirte que estás un poquito desviado. Una hernia abdominal es más bien como un bulto que aparece cuando una parte de tus órganos decide salir de su zona y se cuela por donde no debe. ¡Que no cunda el pánico!, te diremos qué es una hernia abdominal, por qué pasa y, sobre todo, cómo se soluciona.

¿Qué es hernia abdominal?

Antes que nada, tienes que saber que esto se trata de un defecto u orificio en la pared muscular del abdomen que surge por culpa de un órgano que empuja un tejido o el músculo que mantiene a ese órgano en su lugar. La mayoría de ellas salen en el abdomen aunque también pueden salir en la ingle.

La hernia realmente no es la “bolita” que vemos o sentimos, sino el orificio por donde se sale esa bolita o saco herniario. El contenido de este saco puede ser desde grasa abdominal hasta un asa de intestino. Eso depende de su localización y del tamaño.

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¿Cómo se clasifican?

  • Inguinales: son las más comunes, suceden cuando el intestino empuja un punto débil de la pared abdominal y la rompe.
  • Umbilicales: principalmente se dan en bebés y niños cuyo músculo del abdomen aún no está bien desarrollado. Suelen desaparecer solas, si no, se realiza una cirugía. Adultos con obesidad y mujeres embarazadas también pueden sufrir de estas.
  • Hiatales: ocurre cuando una parte del estómago empuja el diafragma hacia arriba invadiendo la cavidad torácica, esto causa reflujo.
  • Spiegel: es poco común que se dé, pero puede bloquear el intestino o cortar el flujo de sangre, por eso es tan peligrosa.
  • Incisionales: suceden cuando hay alguna cirugía abdominal y en el lugar de la cicatriz, algún órgano empuja y vuelve a abrir una incisión.
  • Recidivantes: se trata de una hernia que regresa después de haber sido reparada.

Existen muchos orificios naturales en la pared del abdomen por donde entran y salen estructuras desde y hacia el tórax y los miembros pélvicos, estos son sitios más débiles que al aumentar de tamaño permiten la salida del contenido abdominal.

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¿Cómo saber si tengo una hernia?

El síntoma más frecuente es el dolor y el signo es aumento de volumen. Va desde una pequeña molestia de sentir esa “bolita” hasta tener parte del contenido abdominal dentro del saco herniario.

El diagnóstico ideal de las hernias es realizar un ultrasonido en el cual se puede visualizar tanto el defecto de la pared muscular como el contenido del saco herniario. En el caso exclusivo de la hernia hiatal su diagnóstico se puede realizar por medio de estudios radiográficos con contraste y con una endoscopia gastrointestinal.

Existen ciertas particularidades en algunos tipos de hernias, como las hernias obturatrices, que se presentan con mayor frecuencia en mujeres jóvenes y el síntoma principal es un dolor realmente insoportable.

El tratamiento en el 100% de los casos es quirúrgico. Casi siempre puede ser por laparoscopia, o sea, sin tener que abrir el área. La colocación de la malla, que puede ser sintética o biológica, está casi siempre indicada excepto en algunos casos particulares (ej. hernias umbilicales pequeñas).

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¿Cómo sé si ando débil?

La causa más común de una hernia es la debilidad muscular en el abdomen y aquí te enlistamos una lista de motivos por los que puedes andar débil:

  • Edad avanzada
  • Daño por alguna herida o cirugía
  • Embarazos múltiples
  • Estreñimiento
  • Cargar mucho peso recurrentemente
  • Fibrosis cística
  • Tos crónica
  • Historia familiar de hernias

¿Y la mala noticia?

Es bastante difícil prevenir la aparición de una hernia, esto debido a que existen alteraciones personales individuales y genéticas que pudieran ocasionarlas. ¿La buena? Que ahora sí no te vamos a decir que la solución es que hagas ejercicio (de hecho, cargar mucho peso en el gimnasio puede hacer que se debiliten tus músculos) y dejes el azúcar, porque realmente no depende de ti si te salen o no, pero sí puedes comer mucha fibra y evitar fumar para no empeorar si es que no tienes tan buena fuerza abdominal.

Recuerda, la mayoría de las hernias NO se pueden prevenir, pero SI detectar a tiempo, así que si tienes una hernia abdominal, más vale que te vayas a checar.

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