Niksen: el arte de no hacer nada

Hoy el que siempre está “ocupado” se siente súper importante. Es más, la nueva respuesta en automático a “¿cómo estás?” es “¡muy bien, eh! En friega, pero muy bien”. 

Seguro piensas que ya eres un experto en este arte, pero pasar horas scrolleando tus redes, leyendo artículos inútiles en internet o viendo series todo el fin de semana NO cuenta. Hace poco la Organización Mundial de la Salud (OMS) reconoció el burnout (agotamiento) como una enfermedad crónica causada por el estrés de la vida moderna y recomendó buscar actividades para no caer en sus garras, una de estas alternativas es el niksen. 

¿QUÉ ES?

El niksen es una corriente que nació en Holanda que se traduce literalmente como “no hacer nada” (algo súper difícil porque siempre estamos haciendo cosas, incluso cuando dormimos). Y no creas que significa que estés ojeando todo el día: consiste en dedicar tiempo y energía, de manera enfocada a descansar, a darte tiempo para ser, como estar en un sillón de tu casa con una cobija y ver por la ventana mientras llueve; sin música, sin podcasts, sin celular. Literalmente, hacer nada.

Es importantísimo que lo logres en tu entorno cotidiano. Sentarte a admirar las olas de la playa cuando estás de vacaciones es facilísimo, el reto es hacer lo mismo en la sala de tu casa.

BENEFICIOS

Reduce los niveles de estrés y ansiedad
Te ayuda a conectarte contigo mismo
Retrasa el proceso de envejecimiento
Fortalece el sistema inmunológico
Le da un boost a tu creatividad
Mejora tu capacidad para resolver problemas
Te ayuda a desconectarte de verdad

El neurocientíco Andrew Smart descubrió que nuestro cerebro cuenta con una red neuronal (la red “por defecto”) que se activa al poner el cerebro en piloto automático (dejar que la mente divague) y eso hace que las conexiones entre recuerdos, pensamientos y deseos se vuelvan más fáciles (porque no están centradas ni estresadas en buscar una solución). Y de pronto ese gran problema que, según tú, no tenía solución, llega como por arte de magia, la magia del niksen.

¿ES LO MISMO QUE MEDITAR?

No. Meditar es una práctica formal e intencional en la que te concentras en aumentar tu calma, concentración y balance emocional y te preparas justamente para poner tu mente en blanco. En cambio, en el niksen puedes dejar que lleguen todos tus pensamientos y poner en marcha tu imaginación, claro, sin hacer ninguna actividad.

CELEBRA TU OCIOSIDAD

Si estás acostumbrado a estar haciendo mil cosas, seguro te vas a sentir un poco raro al principio. Que no te moleste, empieza con tres minutos al día y después elévalo a 20. Ve paso a paso:

ESTABLECE EL NIKSEN COMO UN OBJETIVO. Para saber si lo necesitas, fíjate cuándo son tus momentos más creativos y productivos del día y en cuáles te sientes más cansado. Lo ideal es que lo hagas durante esos momentos. Empieza con tres minutos.

PREPARA TU ESPACIO HYGGE EN TU CASA. Tener tiliches tirados o trastes sucios puede hacer que nunca te desconectes ni que te sientas cómodo. Consiéntete con un sillón suavecito, una cobija deliciosa… Algo cozy (en la moi 49 te contamos cómo hacerlo). No estés cerca de la tele, la compu y el cel, porque te van a recordar todos tus pendientes (libros por leer, mails sin contestar o series que terminar).

QUÉDATE QUIETO Y EN SILENCIO.

Suelta la mente y no te claves en que no “estás haciendo nada”, repítete: “tengo una intención”, pero cuidado, no dejes que divague mucho tiempo porque puede hacer que se estanque en ciertos pensamientos que, en lugar de refrescarte, van a empezar a angustiarte.

APROVECHA CUALQUIER OPORTUNIDAD PARA NIKSEAR. Pon tu computadora y teléfono en un cuarto aparte y siéntate en una silla frente a la ventana. Tírate en el jardín y ve al cielo. Siéntate en la banca de un parque y solo observa a la gente pasar. ¿Estás en la chamba? Hay páginas como donothingfor2minutes.com que te permiten practicar el niksen guiado