Te dejamos estos tips para que alargues la vida de tu ropa lo máximo posible
Limpia tu clóset: Por lo menos una vez al año vacía tu clóset y cajones para limpiar a profundidad, quitar el polvo y las basuras que puedan dañar tu ropa.
Lava tu ropa lo menos posible: Es básico leer las instrucciones de cada prenda, no todas necesitan el mismo proceso de lavado.
Evita que se deformen: Las prendas que van dentro de un cajón deben estar bien dobladas y no hechas bola. No cuelgues los suéteres ni prendas pesadas con telas elásticas.
Alterna la ropa: No utilices la misma prenda por dos días seguidos, déjala descansar para que recupere su forma.
Repara lo que sea posible: Puedes teñir los jeans que se deslavan de manera fácil en casa, usa parches para reparar hoyitos y vuelve a coser lo que sea posible antes de desecharlo.
Separa las prendas cuando las laves: Hazlo por texturas y por colores. Ahora, ropa blanca, de color y oscura son las grandes categorías que se han usado en este arte de lavar ropa.
Lava a mano las prendas delicadas: Algunas prendas de vestir tienen materiales delicados, como encajes, estampados en relieve, entro otros, por eso es mejor lavarlas a mano. Así evitarás que estos detalles se estropeen al rozar con otras prendas o botones.
Prefiere el secado al natural: Si el espacio en tu casa lo permite, es mejor colgar la ropa y dejar que el viento y el sol la sequen de manera natural.
Guárdalas bien: Revisa que el lugar donde guardas tu ropa no tenga ninguna humedad que pueda afectarla. Lo que no uses con frecuencia, es mejor que lo guardes en bolsas. ¡No olvides sacarles el aire y sellarlas!
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