Broncas invisibles pero heredadas

Una de las cosas que más nos afecta es la identificación, y es una dinámica que oímos pero que muchas veces es inconsciente. La identificación familiar es cuando estás pegado energética pero inconscientemente, con un miembro de tu familia. Incluso alguno que no conoces, por ejemplo, la amante del abuelo que nadie supo que existió, y tú estás cargando un rollo de esa mujer. Por eso es taaaan difícil y pesado, porque son miembros de tu familia que ni sabías que existían y tú energéticamente estás sintiendo algo que no te corresponde. Estás cargando la historia de alguien más, algo que nada tiene que ver contigo, destinos, historias, sentimientos, hasta enfermedades que no son tuyas.

Imagínate una persona que trabaja muchísimo y ahorra porque quiere que el siguiente año sea mejor y nomás no le sucede. ¿Por? Porque está pegada con un ancestro que vivía en la pobreza, entonces, aunque haga todo lo que tiene que hacer, por la identificación no le va bien.

También hay otra dinámica destructiva, que es cuando tú ocupas un lugar y haces una función que no te corresponde. Por ejemplo, cuando el papá no está presente, alguno de los hijos ocupa ese lugar porque se necesita un padre, entonces no solamente es el papá de los hermanos sino también la pareja de su mamá. Y no necesita ser del sexo opuesto. Entonces ocupas el lugar de una persona que no está y acabas metiendo a tu mamá en tu matrimonio porque te convertiste en su pareja sin quererlo. ¿Y lo peor de todo? ¡Puedes tener más de un rol que no te corresponde!

¿Y por qué es tan malo? Porque entonces no puedes ocupar el lugar que te corresponde. Si tú estás ocupando otro lugar no puedes ocupar el tuyo porque le estás dando energía de vida a un ancestro, a alguien que va arriba, entonces no lo puedes pasar hacia abajo.

No recibes lo que necesitas de tus papás y de tus ancestros, la energía te debe fluir de arriba, por lo tanto, lo que no te han dado a ti, no lo puedes tomar. ¿Cómo le vas a pasar energía de vida a tus hijos si tus padres no te la dieron a ti? Si eres mamá de tu papá, por ejemplo, ¿cómo le darías esa energía a tus hijos?

Por eso es TAN IMPORTANTE sanar, soltar y hacer todo por convertirte en tu propia persona, para que todos puedan hacer lo mismo. Tenemos que dejar que nuestros hijos tomen sus propios papeles, pero para eso debemos estar seguros de que nosotros solo estamos en nuestro rol.

Cuando no dejamos que cada uno tome su rol, no evolucionamos ni dejamos evolucionar al otro. Cuando hay desequilibrio entre lo que das y lo que recibes, la balanza que tenemos dentro a veces se va para un lado o para el otro. Y empezamos a dar sin recibir y esta balanza mal calibrada hace que generemos relaciones abusivas. En la salud, en el trabajo, en la pareja, porque te sientes mucho más cómodo dando.

En la familia nacemos y nos desarrollamos. No hay forma de que su influencia no condicione en lo que nos convertimos, pero sí de que decidamos que funcione en favor de nuestro bienestar y felicidad. 

¿Cómo sanar?
Como en todo proceso de sanación, el primer paso es aceptar que algo anda mal, el segundo decidir que lo quieres cambiar y el tercero puede ser admitir que no puedes solo (a veces llega más tarde esa revelación). Para eso existe la terapia familiar y también, hay de muchos tipos según cómo, con quién y cuánto tiempo quieras trabajar tu problema. Aquí puedes leer sobre los tipos de terapias.