Aunque no lo creas, el asma es muy común en los atletas de alto rendimiento. De hecho, el 80% de los deportistas lo tienen, como David Beckham, Michael Felps y Denis Rodman.
Tooodos tenemos achaques y pequeños problemillas que nos han detenido de lograr nuestros sueños. Que si la rodilla, que si la espalda… ¿Pero qué crees? Hay muchísimos atletas olímpicos también tienen enfermedades con los que han tenido que luchar para llegar al podio. ¿Sabes cuáles son? Aquí te contamos sobre algunos atletas olímpicos con enfermedades y cómo las han superado para estar en los Juegos Olímpicos.
Lyles es un atleta americano que ganó la medalla de oro en 100 m planos, por sólo mileeesimas de segundo. SIN EMBARGO, tuvo que salir de un montón de adversidades para poder llegar a donde está ahora. Noah Lyles tiene asma, lo cual desde pequeño lo detuvo de hacer muchísimas actividades, incluso tuvo que estudiar desde casa, y no podía ni salir a jugar sin tener ataques.
Lo que pasa con el asma, es que los pulmones se inflaman, causando dificultad al respirar, cerrando las pequeñas cavidades que permiten la entrada del aire. Lyles pudo sobrellevar esta condición a través de los inhaladores que ayudan a que esta inflamación disminuya, y empezó a practicar atletismo en la preparatoria.
No solo eso, también ha enfrentado depresión, déficit de atención, y dislexia, pero pudo superar todos estos problemas a través del atletismo, ¡hasta ganó una medalla en los Juegos Olímpicos de París 2024!
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Simone regresó a estos Juegos Olímpicos después de darnos una clase de salud mental en Tokio 2020. Y es que con todo el estrés y presión que sentía, a Simone le dieron varios ataques de pánico y ansiedad, y llegó a su límite cuando entrenando sufrió los twisties, que es una desorientación que llegan a sentir los gimnastas bajo mucho estrés cuando están en el aire. Esto la dejó mucho tiempo sin posibilidad de entrenar con los resultados que deseaba, por lo que decidió que después de Tokio se retiraría para cuidar su salud mental.
Ahora, volvió recuperada y con todo para llevarse tres medallas de oro, y una de plata. Al parecer a veces una pausa es todo lo que necesitamos.
Ledecky empezó su carrera en Londres 2012 a los quince años, y desde entonces, ha ganado nueve medallas olímpicas. Peeero su camino al podio no ha sido tan fácil. Katie sufre del síndrome de taquicardia ortostática postural. Básicamente, lo que esto significa es que Ledecky guarda sangre en los vasos sanguíneos que están abajo de su corazón, y cuando cambia de posición, estos vasos se vacían soltando ciertas sustancias que le provocan mareos, desmayos y agotamiento.
Aún así, Katie es la nadadora más galardonada en su categoría, y planea seguir compitiendo por muchos años.
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Nielsen recibió la noticia de que debutaría en Tokio 2020, acompañada de que tenía esclerosis múltiple, que es una enfermedad que ataca a el sistema nervioso. A pesar de esto, Laviai no sólo se propuso a terminar los Juegos de Tokio, sino a llegar a París en 2024. Y así lo hizo. Nielsen tiene ya una medalla de bronce en los Juegos Olímpicos de París.
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