Pues no, no es un mito. La toronja nos puede ayudar a bajar de peso y aquí te digo cómo.
Mucho tiempo pensé que la dieta de la toronja, o el rumor de que la toronja de alguna forma adelgaza, era una estrategia creada en el siglo pasado por los productores de toronjas y jugos. Algo hay de verdad en eso, pero parece que de cualquier forma, la toronja sí tiene propiedades metabólicas benéficas para quienes buscan bajar de peso.
La toronja tiene un compuesto flavonoide llamado naringina que le da el sabor amargo. Cuando la naringina se metaboliza en nuestro cuerpo, se convierte en naringenina. En el hígado, esta molécula hace que este órgano se comporte como si estuviera en ayuno, y eso puede que sean buenas noticias para quienes buscan enflacar, y seguramente también para quienes venden toronjas.
La insulina es una hormona que ayuda a que las células (especialmente las células del hígado, músculos y células grasas) absorban glucosa. Cuando comemos, la sangre se llena de glucosa proveniente de los alimentos, la cual usamos como energía. La glucosa también dispara una señal que hace al hígado consumir las reservas energéticas para tiempos de crisis, es decir, grasas. En nuestra vida moderna y urbana donde las crisis raramente son por falta de alimento, las grasas se van acumulando y acumulando.
Si los tejidos de una persona comienzan a hacerse resistentes a insulina, será más difícil que la glucosa entre a estos tejidos; el cuerpo entonces produce más insulina para poder contrarrestar esto. La insulina, además de ayudar a que el azúcar entre a las células, tiene otros trabajos. Uno de ellos es guardar grasa en un ciertas células. Si hay más insulina en el cuerpo, entonces habrá una tendencia a almacenar más grasa.
La naringenina hace que el hígado comience a metabolizar las reservas de energía, es decir hace que esa grasa acumulada se convierta en energía. También incrementa la sensibilidad de las células a la insulina, con lo que promueve que metabólicamente no acumulemos tanta grasa.
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Además de las consecuencias estéticas, la sensibilidad a la insulina es muy importante para la salud, ya que si comenzamos a perder esta sensibilidad estamos probablemente en el camino hacia padecer diabetes. Y puede ser que el camino hacia el lado contrario, además de buenos hábitos alimenticios y ejercicio, esté tapizado de rodajas de toronja.
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