Soluciones a las peleas entre hermanos

En la infancia, los hermanos pelean al menos cinco veces al día… ¡la tercera parte del tiempo que pasan juntos! No tienes que ser mejor amigo de tu hermano toda la vida, pero sí intenta llevar una relación sana.

Las causas de estos pleitos son por diferencias de personalidad, juegos, falta de atención (más atención a uno que a otro) y cuando esto se acumula, el hermano, en vez de convertirse en un compañero, se convierte en rival, y se marcan envidias que tendrán su repercusión en la edad adulta.

La clave está en ser positivos, perdonar y reflexionar sobre los sentimientos con respecto a nuestros hermanos. Como dije antes, no es necesario ser mejores amigos, lo que sí es importante es definir el tipo de relación, los puntos de vista y lo tolerable de cada quien. El ser hermanos no hace necesario un entendimiento, ni comunicación cotidiana, así que debe buscarse la mejor relación dentro de las diferencias.

En la edad adulta es aun más complicado, pues los pleitos se ubican en relaciones competitivas. Es inevitable que siempre uno sea “mejor” en el matrimonio, casa, trabajo, con hijos, en toma de decisiones… ¡no se puede controlar!

Herencias y celos son los motivos principales de peleas entre hermanos en la edad adulta, y con herencia me refiero a un sillón de la infancia hasta dinero.

Hay gente que tiene la ‘memoria del rencor’: no olvida nunca, no perdona y busca venganza. Y hay gente que tiene ‘la memoria del dolor’, que admite con pena lo irrecuperable pero en vez de quedarse empantanado en el ayer, busca generar un proyecto de presente mirando hacia adelante.

¿Qué tipo de relación tienes? Escucha esto para saber más del tema.