El sexo casual puede provocar ansiedad

Nuestra energía transforma su estado constantemente. Por eso, por ejemplo, nuestros chakras no se encuentran siempre en el mismo estado sino que varían según las experiencias, las emociones e incluso los hábitos que mantenemos.

Lo mismo ocurre en el útero de las mujeres, donde hasta el ciclo menstrual puede alterar el estado de la energía del útero. ¿Te imaginas lo que ocurre con el sexo casual?

En el sexo casual es muy probable que te encuentres con más de una pareja agresiva, egoísta y quizá hasta narcisista. El sexo con gente que no nos respeta y solo busca su propia satisfacción modifica la energía femenina hacia un aspecto negativo, lo cual puede generar ansiedad. Esto ocurre porque cuando el hombre eyacula dentro de la mujer deposita en ella cargas de su energía, la cual podría estar llena de resentimiento, ira, tedio, menosprecio y sometimiento si no se trata de una relación basada en el respeto y el cariño.

El útero y toda la zona reproductiva de las mujeres es un centro de energía vital femenina. Por eso, al dañar nuestra energía mediante penetraciones que no nos benefician podemos perder control sobre nuestra capacidad para tomar decisiones basadas en nuestros verdaderos deseos, generar culpa e inseguridad y reducir el poder de su fuerza creadora y creativa. Sensaciones vinculadas con la ansiedad.

Por cierto, también los hombres dañan su energía cuando tienen sexo casual en donde no hay respeto y cariño, y es que su energía femenina también recibe el rechazo como un agresor a su bienestar.

Poder integrar sexualidad y espiritualidad permite desarrollarnos en plenitud, conocer nuestro cuerpo y respetar la energía que entregamos y recibimos durante los encuentros sexuales. Te invitamos a que identifiques las prácticas sexuales con las que te sientes cómoda y las que no, y que evites situaciones y relaciones en las que no sientas cariño y respeto. Así podrás proteger tu energía de intercambios negativos mientras que aprendes a honrarte y comprenderte a ti misma.

Fuentes: Universo Shanti