Cómo hacer funcionar el amor

El deseo del amor es un detonador humano fundamental. Sin importar lo que somos o lo que hacemos o si somos hombres o mujeres, casados o solteros, todos queremos exactamente la misma cosa cuando se trata del amor: alguien con quien disfrutar la vida, alguien que nos haga reír y que nos haga sentir bien.

¿Cómo hacer funcionar el amor si siempre se te descompone?

El príncipe no existe
Muchas mujeres continúan esperando un hombre que no tenga defectos, eso no existe. Los hombres son más que solo personajes de cuentos y al igual que las mujeres tienen fallas. Deja que los hombres se sientan aceptados, se puedan abrir, permitir ser vistos y conocidos, renuncia al deseo del príncipe y acepta los defectos. Tú también debes dejar de tratar de siempre ser perfecta, muchas personas prefieren una persona con quien puedan relacionarse. Debes ser más abierta y saber que un hombre también necesita ser escuchado. Mantén confianza en su relación los hombres basan su confianza en sí la mujer lo quiere a él o a la idea de el.

Practica la pasión
Recuerda que no tiene nada de malo divertirse en la cama aunque estén en una relación comprometida y seria, no le hagas caso a la sabiduría popular que dice que los hombres quieren mujeres que sean dóciles y se acomoden a sus deseos. No temas a este tipo de sexualidad, de libertad y de vitalidad. La pasión no es una cualidad con la que naces, la puedes aprender y también olvidar. No tapes tu pasión por miedo a que cause un sentimiento de peligro.

Confía en lo que eres
No temas ser una mujer fuerte, el vínculo de un hombre y una mujer que lo guía e inspira es de los más duraderos. Preséntante cómo lo que eres, así tu relación será más honesta y duradera toma el riesgo. Deja a un lado las fantasías y desarrolla un sistema de apoyo mutuo.

Saber ser amiga
Los hombres quieren y necesitan la amistad de su pareja más que las mujeres. Los hombres se cierran mucho con sus amigos por lo que buscan intimidad con su pareja. Responden a las amistades con gratitud y lealtad, se sienten acompañados y con más confianza. La mujer que comprende esto se convierte en la compañera de vida de su pareja.