La sexualidad del mexicano #ConsultorioMoi
¿Experimentador o conservador? tenemos los detalles de cómo se comporta el mexicano frente a la sexualidad, el porno y la infidelidad.
La inteligencia erótica es la capacidad de conservar el fuego en la pareja dentro y fuera de la recamara, pero te has preguntado, ¿qué pasa con la sexualidad del mexicano? Aquí te damos una buena explicación sobre todo este tema taaan importante.
¿Qué pasa con la sexualidad del mexicano?
Existen dos perfiles sexuales:
Experimentador…
– Conocimiento amplio sobre sexo
– Vida sexual activa
– Búsqueda de experiencias
– Conocen más juguetes, posiciones y sexo abierto
– La sensualidad, erotismo y ‘Fore Play’ son la parte romántica para una relación sexual.
– Fantasías sexuales están muy presentes
Conservador…
– Conocimiento es reducido/basto
– Más tradicional en su vida sexual -pareja formal-
– Cerrados a otras prácticas sexuales ‘diferentes’
– No interés sobre nuevos temas
– Mucha importancia al ‘Fore Play’ romanticismo
Cuando la vida sexual en pareja es mala, representa 80% de la relación; si va bien, es el 20%.
La inteligencia erótica del mexicano no está bien desarrollada.
Para los mexicanos es súper importante llegar al orgasmo.
Las mujeres usan más disfraces eróticos que los hombres.
Disfraces más usados por los mexicanos en el sexo:
– Policía/criminal
– Doctor/enfermo
La relación sexual promedio en México dura 15 minutos.
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Los hombres ven pornografía para masturbarse y las mujeres para aprender.
La cama es el gran espacio de sexualidad para el mexicano.
Si no existe juego previo, la relación sexual se vuelve rutinaria.
Cada vez más las mujeres se sienten libres para poder hablar de su consumo de pornografía.
¿Qué fantasías tienen los mexicanos?
– Tríos
– Lugares públicos
– Con otras personas
Cada pareja define y establece qué sí y qué no es una infidelidad.
El egoísmo y la falta de comunicación pueden generar infidelidades en las relaciones de pareja.
La infidelidad por déficit se genera por soledad, falta de comunicación, mala relación o relaciones no placenteras.
Al mundo swinger entras cuando estás en el mejor momento de tu relación, no en el peor.
Si crees que el mundo swinger vas a salvar tu matrimonio, estás muy equivocado.
