Logra que tu nariz se vea más afilada con estos trucos

Tu nariz está expuesta a todas las puercadas ambientales: polvo, contaminación y rayos solares que van tapando los poros. Como es una zona llena de glándulas sebáceas, esas que producen grasita, al taparse aparecen imperfecciones y puntos negros. Estos no son suciedad acumulada sino sebo oxidado. Ok, como sea, fuchi. Tienes que ser disciplinada para que se vea perfecta.

Para que tu nariz deje de parecer tablero de timbiriche hay que limpiarla diario, pero no te talles con mucha fuerza ni uses un limpiador agresivo porque eso estimula la producción de sebo y empeora el asunto. No necesitas nada extraordinario, cualquier limpiador con ph balanceado te funcionará.

No veas a la grasa como tu peor enemiga, ayuda a que tu piel se mantenga flexible y protegida. Embarrarse una mascarilla a la semana controla el exceso. Aplica el multimasking (mascarilla con un producto diferente para cada zona de tu cara), poniendo en tu nariz ingredientes seborreguladores, purificadores y desintoxicantes.

Si tienes piel grasa, puede que huyas de las cremas espesas. Está bien, pero necesitas hidratarte, si tu piel está seca vas a producir más grasa para equilibrarse.

Siempre, siempre, siempre usa bloqueador solar. Los rayos UVA y UVB dañan el ADN de las células, las envejecen y son los causantes de las arrugas prematuras, además, aumentan el riesgo de tener cáncer de piel.

Hidrata tu nariz con sueros o geles a base de agua. Recuerda que lo que comes también nutre tu piel, alimentos fritos o capeados terminarán agregando más grasa a tu cara.

Si ya tienes puntos negros, lo peor que puedes hacer es exprimirlos, irritas la zona e infectas los poros con el manoseo. La mejor manera de deshacerse de ellos es usando bandas de limpieza.

Los puntos negros no hacen que los poros sean más grandes, pero sí más notorios. Cuando tu piel esté limpia, con los poros menos llamativos, es cuando la tienes que humectar e hidratar.

NARIZ NUEVA SIN CUCHILLO

Si quieres una nariz más afilada y lo de las cirugías no es lo tuyo, utiliza la técnica de contouring. Solo necesitas dos tonos de base: uno más claro que tu base habitual y otro más oscuro.

El objetivo es jugar con la luz y la profundidad para alterar tus facciones.

Para lograr un efecto natural es importante que seas cuidadosa con las cantidades, comienza con dosis pequeñas. Primero, aplica dos franjas delgadas de base oscura a lo largo del costado de tu nariz y pon la base más clara en el medio. Date golpecitos con una esponja húmeda y resalta el centro de tu nariz con la base más clara, difumina bien y listo.