Estamos en ciclo de Luna Nueva, que sucede cuando nuestro satélite se camufla en el cielo nocturno
Hace dos semanas brillaba en todo su esplendor, pero ha ido vaciándose y ahora representa un recipiente limpio y vacío. ¿Cuál es su mensaje? La pista es que sucede en el signo de Leo, checa qué significa.
Cuando la Luna arranca ciclo en el signo del Sol (Leo), se nos auguran nuevas oportunidades para ser, crear, jugar y expresar.
Venimos de la Luna Nueva en Cáncer (hace un mes), que le puso una lupa a nuestra conciencia de familia (porque obviamente nos estamos cuidando los unos a los otros) y a todo lo que nos parece conocido, como nuestro hogar, nuestro pasado y costumbres más arraigadas. Cáncer representa aquello que nos da identidad desde nuestra condición existencial, como por ejemplo la nacionalidad, el género y los roles familiares que jugamos, o sea, si somos mamás, papás, hij@s, herman@s, etc. Sin embargo, todo eso son condicionamientos del ego, de las identidades que inevitablemente se forman al tener un cuerpo que existe en el espacio y el tiempo.
Por su parte, Leo hace énfasis en el individuo, en el yo, en el concepto del “self”. ¿Te has preguntado esto?: Si todas tus experiencias surgen y luego se van, si todas tus sensaciones, pensamientos y sentimientos son transitorios, entonces ¿quién eres?
Este cuestionamiento es el que nos lleva a transicionar de la Luna Nueva en Cáncer a la de ahorita, la Luna Nueva en Leo, que nos invita a ponerle atención a nuestro centro, para autoconocernos, nutrirnos, admirarnos por lo que somos y por la heróica batalla que estamos dando en esta existencia loca y fascinante.
Claro, el riesgo es caer en actitudes egoístas o egocéntricas, aguas con eso, pues de lo único de lo que se trata es de reforzar nuestra posición en el mundo, valorar lo que somos, lo que tenemos para aportar y así reconectar con nuestro sol interno, el cual, al igual que aquel que brilla en el centro del sistema planetario, es fuente infinita de luz, calor y creación.
El efecto de una Luna Nueva –que simboliza una oportunidad de renovación– dura, en su forma más potente, dos semanas, pero su cosecha se augura en seis meses (como a mediados de febrero 2021), así que ponte las pilas y autoconócete a fondo, nútrete y salte de los dramas innecesarios para conectar con la verdadera fuerza de tu interior.
Somos seres espirituales viviendo una experiencia humana, no al revés, así que a ponerle perspectiva a la vida y ser más activos para CREAR la realidad que deseamos habitar.
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