Ya basta de decir eso de que “el peor enemigo de una mujer es otra mujer”. Las mujeres sí nos apoyamos entre nosotras.
Se habla mucho de la sororidad pero, la neta, la neta ¿qué tanto impulsas a otras mujeres a crecer? Queremos que de verdat te vuelvas una fuente de inspiración y hagas honor a la palabra sororidad, así que te damos una mini guía de cinco pasos con los que puedes empezar hoy mismo.
Por: Carmen García Cuevas.
El respeto es uno de los principales valores de la sororidad y es vital para el apoyo entre mujeres. Reconocersss las demás voces a pesar de que tengan diferentes opiniones es súper necesario, además, es la base de cualquier relación.
Fíjate que aquellas mujeres que están dispuestas a impulsar a otra mujeres ya entendieron que no hay lugar para las envidias y eso no solo es un signo de sororidad, sino también de madurez.
Ojo: Recuerda que cada quién está lidiando su propia batalla y lo último que necesitamos son envidias.
Ya dejemos atrás eso de andar hablando de las demás a sus espaldas, es muy anticuado e inmaduro, ¿no aprendimos nada de Mean girls? Lo de hoy es apoyarnos, nos necesitamos. Dejemos los prejuicios en el pasado, mujeres, no nos cuesta nada ser buena onda las unas con las otras.
Los derechos de los que hoy disfrutamos son gracias a otras mujeres que nos antecedieron y lucharon por ellos, ahora es nuestra oportunidad de abrir camino a las próximas generaciones. Siempre te hará sentir mejor darle la mano a otras mujeres y regalarles un poco de la experiencia que tienes para que no tengan que forjarse desde cero un camino por el que tú ya pasaste y probablemente te costó trabajo.
A raíz del movimiento me too, cobró mayor importancia el apoyarnos entre nosotras. Si una mujer denuncia algún tipo de abuso o violencia, lo último que necesita es que la juzgues. Ya pasó por momentos garrafales y encontró la fuerza y el valor para hablar, lo peor que puedes hacer es darle la espalda. Tal vez el día de mañana ese valor sea inspiración para otras y se atrevan a romper el silencio.
No nos educaron para apoyarnos las unas a las otras, sino para competir, pero está en cada una de nosotras el paso a la sororidad. OJO no significa que todas debamos ser mejores amigas, simplemente es ser aliadas y remar JUNTAS en contra de todo aquello que atenta a nuestros derechos.
¿Y tú? ¿cómo apoyas e impulsas a otras mujeres?
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