Por qué sí deberías ser donador de órganos

Donar un órgano es el máximo regalo que le puedes hacer a alguien. Hay tantos mitos a su alrededor que, cuando nos toca, nadie sabe qué hacer. Te vamos a ayudar a que veas lo fácil que es

Por: Héroes por la vida

México es uno de los países que más dona en vida, pero no en la muerte. Eso habla de un país dadivoso, pero con pánico a tomar decisiones cuando de la muerte se trata.

En nuestro país hay más de 21 mil 500 personas, incluyendo niños, que necesitan un trasplante (13 mil 700 esperan un riñón y 7 mil, córneas), pero solo se practican alrededor de 1,500 de donadores fallecidos, o sea 8% de los casos.

 

La mayoría de los que reciben el órgano que necesitan es porque un amigo o familiar se los dona en vida. Obviamente, hay órganos que no se pueden donar en vida, como un corazón, pero sí puedes dar médula ósea, partes de hígado, pulmón, intestino, páncreas y un riñón. También puedes donar piel, huesos, corazón, córneas, todo tu intestino y más, una vez que mueres. De hecho, los riñones son los órganos más solicitados.

 

¿Cómo me hago donador?

Lo primero que tienes que hacer es hablar con tu familia para hacerles saber tu decisión.

Luego, registrarte en el Centro Nacional de Trasplantes (CENATRA) para ser donador a tu muerte; ahí también puedes imprimir la credencial que te acredita como donador.

Los menores de edad solo pueden donar en vida médula ósea, siempre y cuando sus papás lo acepten; si un niño fallece, ellos decidirán si sus órganos son donados.

 

Dona tu cuerpo a la ciencia

Cuando lo haces, permites que lo estudien y se puedan desarrollar nuevos tratamientos médicos, técnicas quirúrgicas, dispositivos biomédicos, en fin, todo lo que pueda ayudar a vivir mejor a los seres humanos.

En México, la UNAM tiene el Programa de Donación de Cuerpos, lo único que tienes que hacer es registrarte en pdc.unam.mx

 

MITOS Y VERDADES

 

SI SABEN QUE SOY DONADOR, LOS DOCTORES NO SE VAN A ESFORZAR PARA SALVARME 

Un doctor siempre tiene como prioridad salvar la vida de su paciente, solo pensará en usar tus órganos cuando hayas fallecido, tengas muerte cerebral o no tengas esperanza de vivir.

SI DONO, ME PAGAN EL FUNERAL 

Al donar, no esperes ninguna recompensa monetaria. Tu familia deberá pagar los gastos médicos previos a la muerte y otros, como los del funeral.

SI NO SOY SALUDABLE, NO PUEDO DONAR 

No necesitas ser atleta olímpico para donar. Hay quienes beben, comen mal, fuman, y lo han hecho. Todo depende de cómo mueras.

SI DONO, VIVIRÉ HORRIBLEMENTE EL RESTO DE MIS DÍAS 

La mayoría de los donadores continúa su vida como antes.

TENGO QUE SER RICO PARA RECIBIR UN ÓRGANO 

No. El tipo sanguíneo, la urgencia médica, la ubicación geográfica, el tamaño del órgano, etc., son los únicos factores que importan a la hora de que te toque o no una donación.

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