Estas son las mentiras que no debes decirle a tu doctor, podrías cambiar el diagnóstico o alentar la recuperación.
Has ido más de una vez con tu doctor de cabecera, y seguro siempre le mientes. Antes de negarlo, lee estas mentiras chicas que pueden llegar a ser más graves de lo que crees, y dinos si las has aplicado.
“Estoy tomando las medicinas en tiempo y orden”
Todo con la verdad, si no los estás tomando, dilo. De lo contrario te cambiarán el medicamento por otros más fuertes, porque el doctor asume que no te están funcionando.
“No estoy tomando medicamentos”
Este “detallito” podría dar mal tu diagnóstico. Debes decir que medicamentos estás tomando, aun si son naturales, tu doctor debe tomar en cuenta eso para recetar algo que no tenga efectos colaterales. Una mala combinación de medicamentos podría alterar la presión sanguínea, incluso afectar en depresión y ansiedad.
“Vengo en ayunas”
Cuando te piden ir en ayunas a una operación o revisión, es porque debes hacerlo. Esto se debe tomar en cuanta para evitar consecuencias desagradables, ya que los medicamentos o procesos están hechos para implementarlos en ayunas.
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“Mmm sí, hago ejercicio y como sano”
No te sientas presionado por el qué dirá del doctor. Ellos tampoco se cuidan tan estricto como crees. Los doctores saben perfectamente que la combinación de buena alimentación y ejercicio es lo ideal, así que no les mientas, ellos se dan cuenta, mejor no hagas el ridículo.
“Casi no tomo alcohol”
Expertos dicen que no se debe tomar más de dos o tres tragos al día, aunque en ocasiones especiales te puedes pasar un poco. Demasiado alcohol trae problemas digestivos, debes comentarle esto a tu médico porque los medicamentos podrían estar fallando por esto.
“Mmm no, no fumo”
Alrededor del 13% de personas fumadoras, ocultan este hábito a sus doctores. Puede que tengas alguna enfermedad relacionado con eso, y eso sea la razón. Si lo ocultas, todo el diagnóstico estará mal.
“No, no duele”
Muchos van al doctor haciendo un drama por nada, y otros simulando el dolor más fuerte del mundo. Debes decir exactamente qué te duele y el nivel de dolor que tienes, es la clave para saber de qué se trata tu enfermedad.
“Entendido”
Seamos sinceros, la mayoría no entiende ni pío de lo que dice el doctor, todos esos términos extraños que ni en la escuela te enseñaron resultan abrumadores pero dices que si entiendes, total, te tomas los medicamentos y ya. Así no funcionan las cosas. Si tienes una duda, pregunta ahí mismo, no esperes a la siguiente consulta.
Se sincero y responde cada una de las preguntas que se te hagan, y lo más importante, no te quedes con dudas.
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