¡Cambia tu ADN con ejercicio!

Te hemos dicho hasta el cansancio que tienes que hacer ejercicio porque bajas de peso, evitas la diabetes y te ahorras el infarto, pero te vale… ¿Nos harías caso si te dijéramos que la clase de zumba pueden cambiar tus genes?

Resulta que el ejercicio puede cambiar la forma y el funcionamiento de nuestros genes, y esto nos puede servir para mejorar nuestra salud. Los genes todo el tiempo se
están prendiendo y apagando, dependiendo de las señales bioquímicas que reciben del cuerpo. Cuando los genes están prendidos, expresan proteínas que desencadenan respuestas fisiológicas en distintas partes del cuerpo. Los científicos saben desde hace tiempo que algunos genes pueden encenderse o activarse como respuesta al ejercicio. Lo que no se conocía era cómo sabían que tenían que responder al ejercicio.

Aquí entra la epigenética, que son cambios que indican cuándo se prenden o se apagan los genes, pero sin alterar la secuencia del ADN. Estos cambios ayudan a que el gen reciba y responda a las señales bioquímicas del cuerpo, así los patrones cambian de acuerdo con tu estilo de vida. Por ejemplo, comer de cierta forma o vivir en lugares con mucha contaminación pueden cambiar los patrones de metilación de algunos genes.

Dependiendo de los genes involucrados, podemos modificar aspectos nuestra salud y hasta reducir o aumentar el riesgo de ciertas enfermedades. Algunos estudios han descubierto que una sola sesión de ejercicio puede cambiar de inmediato los patrones de ciertas células de los músculos, peeero… Lo que no se sabe es si a largo plazo estos cambios permanecen ni cómo lo hacen.

Control de genes

Cuando se eliminan grupos metilo del ADN, los genes se activan y la célula puede convertir la información almacenada en enzimas y proteínas. Con esto, los músculos aumentan la quema de calorías y el consumo de oxígeno. Cuando haces ejercicio, el ADN tiene menos grupos metilo, lo que significa que los músculos se ajustaron a las demandas metabólicas del ejercicio.

¿Cómo lo supimos?

Es difícil aislar los efectos del ejercicio porque hay muchos factores ambientales que cambian los patrones de metilación. Lo que hicieron unos científicos en el Karolinska Institute de Estocolmo fue que participantes de un estudio usaran solo una pierna para pedalear una bicicleta, así cada persona era su propio grupo de control. Los voluntarios pedaleaban con una pierna durante 45 minutos y luego se les hacía una biopsia muscular; en ese momento, la pierna que se ejercitó resultaba mucho más poderosa que la otra. Con un análisis genómico sofisticado, descubrieron que las células de los músculos ejercitados tenían nuevos patrones de metilación, los cambios no aparecían en la pierna que no se ejercitó. La mayoría de los cambios se encontró en genes que tienen que ver con energía del metabolismo, respuesta a la insulina e inflamación de los músculos.

¿Qué pasa en mi cuerpo?

• Riñones. Después de hacer ejercicio, los riñones filtran mayores cantidades de proteína en la pipí y también facilita la reabsorción de agua, manteniendo al cuerpo mejor hidratado.
• Diafragma. Se fortalece con el ejercicio evitando el dolor de caballo o hasta que te dé hipo tan seguido.
• Cerebro. Incrementa el flujo sanguíneo e inmediatamente empiezan a funcionar mejor las células cerebrales, haciéndonos sentir más alertas. El cerebro puede acostumbrarse a dar instrucciones a los genes para prenderse y apagarse.
• Pulmones. El ejercicio hace que la sangre llegue mejor oxigenada a los pulmones, ayudando a que el cuerpo elimine más dióxido de carbono.
• Huesos. El ejercicio te ayuda a mantener tu masa ósea y, de hecho, las rutinas de pesas son uno de los remedios más efectivos para osteoporosis.

Cuerpo, mente y alma

Hay ejercicios, como el yoga, que pueden prender y apagar ciertos genes: no es lo mismo subirte a la elíptica, que realizar una práctica que te exige concentración y presencia mental. Te da más beneficios porque ejercitas desde tu cerebro hasta tu dedo chiquito del pie.

Por ejemplo, prácticas como el yoga, Qi Chong y Tai Chi regulan la producción de la proteína kappa B (NF-B) que se genera cuando hay estrés, e incluso reduce la inflamación ocasionada por estrés crónico.

GLOSARIO GENÉTICO

Genoma humano. Secuencia de ADN contenida en 23 pares de cromosomas

Genes. Unidades de información en el ADN

ADN. Ácido nucleico que contiene las instrucciones genéticas

Epigenética. El estudio de los factores externos que juegan un papel muy importante en la genética.

Metilación. Modificar la función del ADN cuando se encuentra en el gen promotor