"Claro, ser hijo de Victoria Ruffo y Eugenio Derbez está muy padre, no digo que no..."
La verdad, no pude haber tenido mejores papás. Son talentosos, divertidos, me apoyan en todo y me empujan todo el tiempo a seguir dando lo mejor de mí, en lo personal y en lo profesional… Eeeeeso sí, los chistes malo,s, el “pregúuuntame ca’on”, las comparaciones y el típico comentario de “tú la tienes muy fácil”, me han perseguido toda la vida.
¿Cómo le ponemos?
A mis papás no les bastó con trabajar en televisión. También hicieron una ensalada de drama, ingenio y creatividad y la plasmaron en mi acta de nacimiento. Me llamo José Eduardo Eugenio González Martínez del Río; sí, justo así, de telenovela. Mi nombre fue una suma de las opiniones de mis papás: “como que me gusta José, pero José solo está muy triste, mejor José Eduardo”. Mi mamá quería que me llamara como el protagonista de una de sus novelas y mi papá, como debe ser, quería que me llamara Eugenio y soy la suma de todas estas partes.
Te están viendo
La verdad los medios siempre me han tenido bajo la lupa. Desde que me acuerdo han estado pendientes de cada movimiento. También tiene mucho que ver la situación entre mis papás, lo bueno es que ahora hasta los entrevisto y los dos tienen un gran sentido del humor. Ya veo normal toda la onda de hablar con los medios y entiendo por qué el interés, pero de niño es difícil entender que la gente esté al pendiente de todo lo que haces cuando no sabes ni a qué te quiere dedicar. Además, todos piensan que soy el hijo rebelde de Eugenio (y también de mi mamá). El que echa relajo, al que le gusta la fiesta, pero soy más reservado, serio y disciplinado de lo que la gente cree.
¿Y mis hermanos, ‘apá?
Es muy difícil ser hijo único y tener tantos hermanos a la vez. No crecimos untos, nunca convivimos al cien y ahora todos vivimos regados por distintos lugares. Nos vemos poco pero es muy padre saber que contamos el uno con el otro; nos apoyamos, tenemos una muy buena relación e intentamos siempre estar, pero somos taaan diferentes que la convivencia a veces no es tan fácil.
Hijo de papis
La gente piensa que para mí fue regalado ¡y lo peor es que me lo dicen! Pero he trabajado muchísimo, porque es el doble de complicado salir a demostrar que tienes capacidad y talento, que no estás ahí solo por ser hijo de alguien. Vengas de donde vengas, esta carrera es de mucha paciencia. Cuando decidí dedicarme a esto hablé con mis papás, por separado, claro está, y lo tomaron muy bien. Me han echado porras, pero nunca me han ayudado porque siempre les dejé claro que si hacía algo lo iba a hacer por mi cuenta, sin llamadas, sin favores, sin ayuda de nadie. Y así fue, toqué mil puertas hasta que por fin, en 2012, después de muchos castings me quedé en Miss XV, que fue mi primer proyecto grande.
Hace seis años me independicé y ahora tomo mis propias decisiones. Amo todo lo que tenga que ver con el medio; lo que caiga, “le entro”. Por eso me aventé a abrir mi canal de YouTube y ha sido una gran sorpresa para todos la respuesta de la gene, me siento muy agradecido.
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