Salud mental
Por: Edilberto Pena
No siempre es necesario decir la verdad. Soltar una mentirilla de vez en cuando está bien, el chiste es saber cuándo, cómo y para qué
Asociamos la mentira con algo súper malo, pero a veces está bien decir una mentira piadosa. La mentira ha estado arraigada en la naturaleza humana desde el inicio de la vida, tan es así que mentimos para sobrevivir, y representa la primera oportunidad de aplicar nuestro libre albedrío verbal (desde que aprendemos a hablar, se nos ofrece en bandeja de plata el chance de no decir la verdad).
¿Pero por qué mentimos?
Mentir requiere de una buena cantidad de inteligencia y tiene algunos beneficios psicológicos (como descarga emocional o parte de nuestro instinto de supervivencia). Además, lo hacemos…
Hay de mentiras a mentiras
Para Santo Tomás de Aquino, las mentiras se podían dividir en tres tipos:
La mitomanía no es una enfermedad psiquiátrica tal cual. O sea, no existen personas enfermas incapaces de decir la verdad. Existen algunos trastornos de la personalidad en los que se miente frecuentemente, pero como parte de una de sus características principales.
Por: Edilberto Pena