fbpx
20-04-2025 03:46:16
Moi
¿Por qué te cuesta estar solo? ¡Que nadie sepa tu sufrir!

Salud mental

¿Por qué te cuesta estar solo? ¡Que nadie sepa tu sufrir!

Por: Samantha Vazquez

Mientras unos la odian o les duele, para otros es un sueño difícil de cumplir. Exploremos la soledad y por qué te cuesta estar solo.

Conforme va pasando la vida, este sentimiento de nostalgia (y algo raro) suele tener diferentes implicaciones e incluso puedes haberte dado cuenta de que mientras más tiempo pasa, es posible que busques más espacios para estar contigo mismo. Probablemente esto se deba a que con el tiempo nos comenzamos a sentir un poco más cómodos en “nuestra propia piel” y a darle menos importancia a la opinión a nuestro alrededor. En fin, interpretaciones puede haber miles de millones, por eso vamos a empezar desde la raíz científica de este tema que es tan único y darle respuesta a… ¿por qué te cuesta estar solo?

¿Por qué te cuesta estar solo?

Touch me!

En lo que respecta a la soledad, la falta de contacto físico con otro humano puede generar unos picos de estrés increíbles en el cuerpo. Cuando un organismo está sometido a mucho estrés por algún tiempo sostenido, la depresión será la segunda en aparecer; siendo la oxitocina la encargada de encender sistemas de recompensa y reconocimiento básicos para nuestra especie, así como ser el pegamento en nuestras relaciones personales a través del contacto físico e intercambio emocional, la restricción de esta hormona nos explica el primer enfoque de su relevancia en los procesos de este estado emocional.

En otras palabras, la soledad nos cuesta porque nuestro cuerpo entero nos demanda contacto con otros humanos, un contacto completo, emocional y relevante.

Ser parte de algo

Desde niños comenzamos a tener actitudes para formar parte de un grupo, es totalmente normal y súper necesario. Nuestra existencia en el grupo social la tendemos a medir por la respuesta que obtenemos. Si formamos parte de un grupo de amigos pequeño, pero significativo, nuestras acciones resuenan en todos los participantes y esto nos hace sentir validados y acompañados.

Cuando por cualquier razón nos encontramos alejados de nuestros amigos o personas significativas, podemos llegar a sentirnos raros y sobrepasados de emociones o experiencias que necesitamos compartir, e incluso en etapas como la adolescencia, la relación con los pares es tan importante que cuando hay dificultades para hacer amigos, pueden sentir como si no existieran y el sentirse anulado a cualquier edad impacta mucho en la salud emocional y mental.

En otras palabras, la soledad nos cuesta porque a partir del otro detectamos nuestro impacto en el mundo

También lee: Red flags de que estás saliendo con un hombre que no sabe estar solo

Los otros nos moldean

En los tiempos actuales tenemos mil formas de callar las vocecitas internas de nuestra consciencia y tendemos a evitar emociones incómodas, sobre todo si estamos solos vemos el celular scrolleando a veces sin observar, buscamos furtivamente contacto escrito o atacamos nuestras wishlists de compras por si hay alguna oferta, todo esto a veces, para evitar pensar en algo que nos duele o que sabemos que tenemos que resolver con nosotros mismos y pareciera que estos pequeños demonios aparecen en el silencio, ya sean nuestras relaciones seguras, nuestro aislamiento o nuestra inestabilidad, nos pica y la neta, a veces preferimos huirle a pasar tiempo escuchando nuestros pensamientos y sintiendo nuestras emociones.

En otras palabras, la soledad nos cuesta porque nos miraremos a nosotros mismos como hayamos sido mirados.

También lee: ¿Adulto independiente? Hacks pa’ cuidar de ti mismo si vives solo

No le encuentras sentido 

La solitud es un estado elegido, lo que decidimos, lo que ejercemos cuando queremos estar con nosotros mismos. Todos estos momentos que dedicamos a nosotros mismos, ya sea leyendo algo que nos interese, llevando a cabo el pasatiempo que nos apasiona o simplemente lanzarnos al sillón a pensar, son momentos donde estar solos no se vuelve una tortura.

A esta solitud es a la que nos referimos cuando decía que conforme pasa el tiempo, comenzamos a sentirnos más cómodos estando solos. Si trabajas un poco en ti, notarás cómo te vas haciendo amigo de las vocecitas internas y hasta las consultarás para las decisiones de tu vida y si existe un equilibrio entre estos momentos y los de interacción social placentera, es donde descubres que estar solo, al final, no es tan malo.

En otras palabras, la soledad nos cuesta hasta que le encontramos un sentido.

¿Cómo sentirse cómodo con la soledad?

Haz todo por conocerte

Ve a terapia, escribe un diario, repasa tu biografía, pero por favor, conócete. Existen pocas cosas que den más poder como saber tus botones y lo que ocurre cuando alguien los presiona. El verdadero autocontrol nace del autoconocimiento, de saber acerca del impacto de tu historia en ti mismo y los alcances que esta tiene.

Combate la soledad con presencia

Conéctate con el momento presente, con las personas a tu alrededor y con tus experiencias.

Confianza

Construye tu confianza como lo haces cuando conoces a alguien, date el beneficio de la duda y acompáñate en todo momento como lo haces con tus amigos.

Silencio 

Date chance de escuchar tu silencio y las vocecitas famosas. Date chance de sentir, así de fácil, por muy agobiante que parezca.

En otras palabras, la soledad nos deja de costar cuando estamos en presencia de nosotros mismos.

También lee:

 

Por: Samantha Vazquez

¿Qué tan útil fue esta publicación?

¡Haz clic en una estrella para calificarla!

Calificación promedio 5 / 5. Recuento de votos: 1

¡No hay votos hasta ahora! Sé el primero en calificar esta publicación.