nos vende la idea de que todos los demás están teniendo la cena perfecta, con la familia perfecta, en una casa decorada por arquitectos de Pinterest. ¿La realidad? Quizás tu prima sigue discutiendo con su ex por WhatsApp durante la cena, y a ti ya te cuestionaron tres veces por qué sigues soltero. Estas expectativas irreales pueden generar ansiedad, estrés y hasta esa sensación incómoda de no estar “a la altura”

The dark site: ¿Por qué la Navidad afecta tu salud mental?

Es momento de hablar de un tema que ha sido un verdadero tabú, el por qué la Navidad afecta tu salud mental.

Berenice Villatoro

La Navidad es sinónimo de luces brillantes y nos vende la idea de que todos los demás están teniendo la cena perfecta, con la familia perfecta, en una casa decorada por arquitectos de Pinterest. ¿La realidad? Quizás tu prima sigue discutiendo con su ex por WhatsApp durante la cena, y a ti ya te cuestionaron tres veces por qué sigues soltero. Estas expectativas irreales pueden generar ansiedad, estrés y hasta esa sensación incómoda de no estar “a la altura” cuando no ocurre como lo imaginamos. Aquí te decimos por qué la Navidad afecta tu salud mental.

Presión social…

La presión social por ser feliz todo el tiempo puede ser abrumadora, especialmente si no estás en tu mejor momento. Para muchas personas, esta temporada trae soledad, recuerdos dolorosos o estrés financiero por querer cumplir con expectativas que, seamos honestos, a veces son imposibles.

“No caigamos en que las fiestas tienen que verse como en las películas, con mucha gente festejando, todo perfecto, la realidad es que no tienen que ser así. No nos estresemos hasta caer agotados por lograr un imposible”, revela la psicóloga Marina Mammoliti, en su podcast Psicología al Desnudo.

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Además, las dinámicas familiares pueden ser complicadas, todos tenemos un tío que saca temas incómodos y, si perdiste a alguien cercano, la ausencia se siente el triple. “Tú tienes el poder de crear tus propios rituales, no tienes que esperar que alguien te diga qué hacer, incluso puedes hacer algo muy bonito estando solo, o reunirte con personas que realmente sean valiosas para ti”.

¿Por qué la Navidad afecta tu salud mental?

Si hay algo mega importante que tienes que tomar en cuenta, es que las tareas que se van acumulando en estas fechas nos pueden generar un estrés de horror, que además afectan los neurotrasmisores o las hormonas en nuestro cerebro.

“En este escenario de fin de año, los neurotransmisores afectados varían según la persona, pero suelen involucrar a la dopamina, la serotonina y el cortisol”, explica la doctora Laura Maffei, endocrinóloga y especialista en estrés.

El síndrome del villancico

Para la experta, en ocasiones nuestra mente recibe picos tremendos de dopamina durante estas fechas, lo que sin duda puede afectar todo lo que pensamos que debería ser una fiesta de Navidad.

“El denominado “síndrome del villancico” ilustra el estrés asociado con los picos de dopamina durante las compras impulsivas. Este consumismo innecesario y la presión social pueden afectar la autoestima, lo que genera un nivel adicional de estrés. Además, la separación de los hijos, cada vez más común en familias dispersas geográficamente, también impacta emocionalmente”.

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Complacer a todo el mundo

Cero se vale que estés como loco buscando el regalo más impactante para tu tía que sólo te habla una vez al año, porque esto no sólo va a afectar lo que sientes, también tu salud mental.

“Durante las festividades, las decisiones pueden parecer sencillas desde una perspectiva externa, pero la voluntad de complacer a todos choca a menudo con la realidad, generando tensiones y estrés difícil de controlar. Las expectativas de realizar ciertas acciones o comprar regalos para todos a veces resultan inalcanzables, y las decisiones sobre qué familia priorizar pueden generar conflictos. Hay situaciones que hacen que el estrés aparezca y no siempre se pueda controlar o gestionar adecuadamente”, dice la doctora Maffei.

Rodéate de personas que sumen

Si tienes la suerte de pasar estas fechas con personas que te quieren y te apoyan, aprovéchalo. Pero si no, no pasa nada, puedes pasar una Navidad contigo mismo o con amigos que se sientan como familia. Quality over quantity, siempre.

La Navidad no tiene por qué ser una carga emocional. Escucha lo que necesitas, descansa cuando lo sientas y, sobre todo, recuerda que no hay una manera “correcta” de pasar estas fechas.

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