Lookcionario: ¿por qué la camisa blanca es el básico que necesitas en tu vida?

Si hay algo que 
toda mujer –sin importar a qué se dedique, su edad
 o talla– NECESITA tener,
 es una camisa blanca. Pero como no todas son iguales, te vamos a decir todo lo que tienes que saber para que
te hagas de una. O varias. Y, obvio, cómo combinarla con lo que ya tienes en tu clóset para usarla todos los días.

CON BOTONES

Una tela tipo seda tiene gran caída, es menos rígida que la clásica súper almidonada. Perfecta si… Ya te aburrió la de señor, esta es más femenina.

LA EJECUTIVA

Esta es la básica con un toque extra de personalidad, va bien debajo de un traje negro. Perfecta si… Trabajas en una oficina súper formal.

*La capa doble sobre los botones es buenísima para las que tienen mucho busto porque no se te abre.

LA DE PIRATA

En un blanco perfecto, con cuello ancho y puños XL, tiene toda la personalidad. Perfecta si… Te atreves a darle un giro a lo clásico.

LA CLÁSICA

Seguro ya tienes una o has tenido varias. Es un lienzo en blanco. Perfecta si… Buscas una camisa multiusos que puedas combinar con todo.

TELAS MÁS COMUNES

Algodón – es lo mejor si sudas mucho porque es natural.

Poliéster – hay muchos tipos, lo bueno es que no hay que planchar.

Seda – la más complicada, pero también la más bonita.

EN EL TRABAJO. Obvio que llevas la camisa blanca al trabajo, el chiste es que lo hagas de forma original. Combínala con unos pantalones de color vivo y una chamarra de piel.

EN UNA DATE. Olvídate de ir mega embarrada a una cita con tu galán. Mejor, usa una camisa blanca con una minifalda y una chamarra de mezclilla. Los flats y la chamarra hacen que te veas menos formal.

RELAX NO FODONGO. Los jeans y tenis le quitan toda la formalidad a la camisa. Un pañuelo de colores le da vida al outfit sin mucho esfuerzo. La bolsa y los lentes ayudan a darle personalidad.

DE PURO PARY. Para que veas que la camisa puede ir a todos lados. Llévala de fiesta con unos pantalones metálicos y accesorios negros. No te maquilles demasiado, deja que el pantalón brille.