No tienes que renunciar por completo al plato de pozole, pero sí echarle un ojito a otras cosas para no lamentarte después
Llega septiembre y nuestras calles se llenan de banderas tricolor, mientras nos preparamos para conmemorar las fiestas patrias con amigos y familiares, con los que compartiremos nuestros platillos favoritos.
La comida mexicana es, sin duda, una de las más ricas en el mundo. Pero es cierto, que sus platillos más característicos son sumamente grasosos y altos en calorías, y que, con el pretexto de la celebración, los consumimos en exceso.
Tan sólo un plato de pozole tiene 240 calorías y un chile en nogada entre 500 y 600 calorías[1], cuando la recomendación energética para población adulta es de 2,000 calorías por día. Sabemos que es difícil resistirnos a estos platillos que además regularmente van acompañados de agua de jamaica u horchata, una cerveza o tequila y si cerramos con broche de oro, un buñuelo o churros azucarados.
La diferencia para disfrutar en balance de una comida o cena patria está en los ingredientes y métodos de preparación. Por eso, te compartimos algunos consejos que harán que tu reunión sea tan divertida como la planeas, pero mucho más saludable, poniendo atención tanto en lo que van a comer, como en lo que van a beber, ya que las bebidas son también parte esencial de la celebración.
Ahora sí, prepárate para disfrutar de tus bebidas y platillos favoritos sin preocuparte por las calorías y… ¡Viva México!
[1] Pérez-Lizaur AB, Palacios González B, Castro Becerra AL, Flores Galicia I. Sistema Mexicana de Alimentos Equivalentes. 4ta ed. México: Fomento de Nutrición y Salud, A. C., 2014.
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