La medicina preventiva ¡sí existe!

Si no me duele o no está sangrando no pasa nada… Gran parte de la población mexicana rige los principios de su salud bajo esta premisa ¿no? Estamos acostumbrados a ir al médico cuando no queda más remedio. Y muchas veces, los problemas hubieran tenido una solución muy sencilla.

Las mujeres tienen una mayor consciencia de la prevención que los hombres, aunque aun están lejos de lo ideal. Nos da miedo ir porque pensamos “¿y si me encuentran algo?” Nuestra mente prefiere jugar con la idea de “si no le hago caso no existe” hasta que un día…ya es demasiado tarde.

Hay países en los que la población acude al médico para no necesitar sus servicios. Qué tipos tan locos, ¿no?

También la pasamos quejándonos de los servicios de salud sin darnos cuenta que las deficiencias del mismo, muchas veces son culpa nuestra: al acudir a resolver nuestros males de forma tardía, los tiempos de tratamiento y los costos se incrementan de forma importante.

¿Podemos hacer algo diferente? Te doy 10 consejos para iniciarte en el mundo de la medicina preventiva:

1. Mantén un peso adecuado. Si tienes sobrepeso u obesidad busca apoyo antes de que tengas consecuencias. TODAS las enfermedades crónico-degenerativas como hipertensión, diabetes y cáncer tienen mucho que ver con sobrepeso.

2. Incorpora ejercicio en tu vida. Empieza con 30 minutos de caminata sin parar y a buen paso un par de veces a la semana y ve incrementando hasta llegar a 5 veces a la semana. Mujeres: La principal causa de osteoporosis no es la menopausia, sino la falta de ejercicio. Hombres: Si no hacen ejercicio la testosterona baja importantemente disminuyendo tu potencia y efectividad sexual…

3. Disminuye tu consumo de sal. Si eres de esas personas que le echan sal a la comida incluso antes de probarla, trata con otro tipo de especias o condimentos más saludables.

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4. ¡Córtale al azúcar! ¿Necesitas ese saborcito dulce para terminar cada comida? Intercambia ese postre que no te brinda más que centímetros a tu cintura por una manzana o cualquier otra fruta.

5. Poco a poco ve eliminando los alimentos procesados de tu dieta. Estos son aquellos que vienen empacados y que contienen más de 5 ingredientes. Procura cocinar tu propia comida lo más natural posible. Si te es difícil intenta buscar opciones saludables.

6. ¡Deja de fumar! ¿Qué chiste le encuentras a echar humo por la boca? Es súper bien sabido la cantidad de enfermedades que te puedes ahorrar si dejas esa mala costumbre (sin mencionar el dinero).

7. Descansa. Está comprobado que dormir 7 a 9 horas diarias mejora el rendimiento en todos los aspectos de tu vida.

8. ¡Bájale al chupe! Nadie dijo que dejes las chelas y las cubas; simplemente disminuye tu consumo hacia algo saludable (3 copas a la semana).

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9. Acude a un médico de tu confianza una vez al año para un chequeo general. Puedes discutir más a fondo lo que puedes hacer para mejorar tu salud y disminuir tus probabilidades de enfermarte.

10. ¡Toma vacaciones! Está comprobado que la gente que se desconecta de sus responsabilidades una o dos semanas al año, incrementa sus defensas naturales y su nivel de felicidad es mayor y por lo tanto se enferman menos.

Recuerda que la salud es una carrera de distancia y no de velocidad. ¡Inténtalo!

“Los grandes viajes empiezan con un solo paso”