Ya se puede ver la tendencia emergente de la revolución de las formas tradicionales de trabajo.
La velocidad con la que la tecnología está impulsando el cambio en los modelos de negocio, así como en los procesos mismos, hace que sea necesario revisar los modelos actuales de contratación.
En la actualidad cuando un estudiante universitario termina su carrera, sus conocimientos ya son obsoletos, particularmente si están relacionados con el campo de las tecnologías de información.
Esto hace que el talento requerido para ejecutar los nuevos modelos de operación sea escaso y, por ende, muy apreciado. Las compañías cada vez se verán más comprometidas para atraerlo y retenerlo. Contar con expertos en las diferentes disciplinas será un lujo que no estará al alcance de todos.
Esto nos llevará a explorar modelos innovadores y aprender de aquéllos hasta hoy usados casi exclusivamente en empresas de tecnologías de información, donde la demanda supera por mucho la oferta de talento altamente especializado.
Contrataciones en esquemas por obra determinada son cada vez más comunes. Estos modelos tienen la ventaja de permitir mayor flexibilidad, tanto a las compañías para contar con el talento, como a los empleados al ofrecer sus conocimientos y experiencia.
Las tecnologías de información y los esquemas de movilidad permiten que los modelos de trabajo se redefinan a través de conceptos como tele trabajo, oficina virtual, multitasking y orientación a resultados, donde los gerentes gestionan y monitorean el trabajo realizado, sin supervisar como tal a las personas y el uso de su tiempo. El Talento podrá encontrarse y utilizarse de manera global, virtual y contratarse en esquema de pago por evento.
Bajo este esquema es importante que los gerentes tengan claridad sobre los resultados esperados de cada empleado, monitoreen de forma adecuada el desempeño y brinden una retroalimentación efectiva si las metas no se cumplen.
Los beneficios de este modelo para los empleados es que pueden disponer de sus horas laborales como gusten, logrando un balance entre su vida personal y profesional. También suele aumentar su motivación, pues se vuelven 100% autónomos, lo que reduce el estrés e incrementa la satisfacción laboral.
En ManpowerGroup denominamos Human Age a la época del talentismo, en la que será el talento y no el empleador quien redefina las formas en que el trabajo se llevará a cabo para cubrir la demanda.
La uberización del modelo empleado – empleador está destinada a seguir la misma tendencia de otros modelos de negocio, haciendo disponible la oferta pulverizada (Talento) a un número de demandantes (contratantes) en cualquier momento, en cualquier lugar y en esquemas flexibles.
Aunque aun falta mucho para que las organizaciones de distintos sectores apliquen estos modelos innovadores, ya se puede ver la tendencia emergente de la revolución de las formas tradicionales de trabajo.
A pesar de que hoy en día sean pocos los modelos que ya cuentan con reglas básicas de funcionamiento, en poco tiempo se sumarán a la lista nuevas maneras de trabajar que fomenten la creatividad, el liderazgo, la comunicación a distancia y la creación mediante trabajo colaborativo.
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